Cómplice de la infancia, de la juventud y de una adultez ya adentrada; Cómplice de la vida; Madre con un amor incondicional que hasta las palabras encuentran una juguetona sinceridad y una simpleza en el vivir; Sueños compartidos, regalos dados en el juego del amor; ella, en su reír, hace brillar la vida.
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